Tanto esperar, tanto pedir su regreso a nuestro coso para esto. Dieciocho años ni más ni menos. Eso no se le hace a la afición que tanto ansiaba su regreso. Cebada pegó ayer un petardo en Madrid. No fue capaz de presentar una corrida completa para esta plaza, pues de los nueve toros presentados, sólo tres fueron aprobados. Hay que tener más dignidad ganadero. Tendría que haberse llevado la corrida entera al campo. O completa o nada. Estaba en juego su cartel y su prestigio. Pero no lo hizo. Lidió esos tres ejemplares, dos de los cuales estaban bastante justos de trapío. En cuanto a su comportamiento, resultaron mansos. Parado y a menos el primero; soso y descastado el segundo; manso y con movilidad el tercero.
Remendaron la corrida tres toros de Guardiola. Quien la ha visto y quien la ve, a esta ganadería. Fueron auténticos mulos. Sin casta ni movilidad alguna. Los tres se consumieron en el primer tercio y llegaron a la muleta totalmente aplomados.
Decir que Salvador Cortés sufrió una cornada (y van..) en la faena de muleta al tercero. Encabo y Fernando Cruz no tuvieron suerte. En definitiva, una tarde soporífera.
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